En este
año 2017 mientras la presidenta de Andalucía se postula para salvar el futuro
de España, Europa se dispone a afrontar el Brexit y los americanos reordenarán
sus criterios de prioridades bajo la norma del “America Frist” decretada
por el nuevo presidente Donald Trump.
Europa
se deshace, Estados Unidos se aisla y el mundo se reviste de una incertidumbre
profunda consecuencia del gran daño provocado por la crisis financiera de 2008.
Pocos confían en el futuro y muchos ciudadanos en todos los rincones del
planeta han perdido la fe en el progreso. En occidente pocos creen que el
futuro les traerá una mejora material, y menos aún que sus hijos vayan a tener
una vida mejor que la suya.